Mamá y todo está dicho.

Alguna vez la vida me otorgó el título de Mamá. Una profesión que nunca ejercí, con los propios claro, sí con muchos niños de otras mamás. Con ellos aprendía cada día esa metodología que me llevaba a darles lo mejor de mis enseñanzas. Es algo innato ese amor por dar que llevo en el corazón y se irá conmigo. Hoy es un especial de confesiones desde este lugar de reflexión que he creado para dejar volar al viento los secretos escondidos y ayudaron en mucho a ser la persona que soy.
Porque esto es lo que soy: Una mamá convertida en maestra de campo.


Este poema de Don Luis Landriscina resume un poquito mi vida. Los dos títulos se unen, porque al ser mujer, ya estamos preparadas para cuidar, proteger, alimentar, enseñar y mucho más desde la naturaleza misma de nuestra condición natural. 
Hoy les dejo este mensaje a todas las mamás del corazón, las que aman y enseñan a sus hijos ser buenas personas. 
¡FELICIDADES EN SU DÍA!

A todas, sean dichosas, su "Creación" es el mejor testimonio de vida. Gracias por permitirme estar junto a ustedes.

Con amor: Yolanda.


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